Nuestra historia en el mundo

Nuestra trayectoria colecciona sueños, memorias y alegrías. Recordar que todo comenzó con la creación de una marca hecha exclusivamente para el alma infantil nos transforma. Al final, dentro de cada uno de nosotros vive un alma de niño capaz de traer fantasías y creatividad a la vida.

En cada línea, lo extraordinario. En cada capítulo, una capa extra de alegría. Una fascinación por el color en la vida. Nuestra herencia es sorprendente, emocionante y acogedora. Y en los entresijos de The Fini Company, encontramos a quien dio inicio al gran sueño: Fini.

Desde el inicio fue así. Nacimos en 1971, fruto del gran sueño de Don Manuel Sánchez Cano, español, hijo de campesinos, que a los 12 años comenzó el viaje que lo convertiría en un emprendedor innato. Con más de 40 años, al lado de sus hijos y su amada esposa, realizó un gran sueño: crear alegrías y delicias.

Ante los momentos críticos, Don Manuel siempre decía: “Existen desafíos que vienen para bien”. Y de los fracasos, la persistencia, el esfuerzo y mucho aprendizaje, llegaron los resultados. Emprender es soñar y ser resiliente.

¡Y recordar que todo comenzó de forma artesanal! En la cocina, Don Manuel y su esposa preparaban las recetas, mientras los hijos embalaban los caramelos y recorrían en bicicleta las calles de la pequeña Murcia. ¡Del sueño y el amor de la familia se hizo nuestra historia!

De a poco nacían los chicles, los caramelos de gelatina, los marshmallows y los tubos. Con sabor a infancia, los primeros productos tenían gusto a tutti-frutti. En la década de 1990, las clásicas Dentaduras entraron en el juego de la familia.

En los años 1980, todas estas delicias conquistaron Europa. Y en la década de 1990 llegaron a Brasil. De océano a océano, llevamos alegrías y creamos momentos mágicos en más de 100 países, con más de 1.000 productos y más de 90.000 toneladas de dulces producidos en todo el mundo. Del sueño nació la referencia en gummies en la venta minorista a nivel global.